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Referencia: 3049614003417
77.69 impuestos excl.
Formato: 750,00 ml
Graducación: 12%
El Champagne Veuve Clicquot Rosé es producto de la mezcla de entre 50 y 60 crus. Basado en el blend tradicional del Brut Yellow Label, este espumoso es fresco y afrutado, con notas de frutos secos, bizcocho y pastelería vienesa.
Variedad de uvas: Chardonnay, Pinot Meunier y Pinot Noir
Origen: Champagne (Francia)
Color: rosa salmón con destellos cobrizos.
Nariz: muy expresivo con frutas rojas, notas de frutos secos y repostería.
Paladar: Armónico, fresco y bien equilibrado, notas de mermelada de fruta roja.
Madame Clicquot nació en Remis, Francia en el año 1777, hija del Barón Nicolas Ponsardin. Su cuna le permitió tener acceso a la mejor de las educaciones y al más exclusivo círculo social. En 1798 se casó con François Clicquot, heredero de la Maison Clicquot con quien compartía la pasión por la creación del champagne. François murió en 1805 y su viuda tomó las riendas del negocio familiar. La casa de la Veuve Clicquot se maneja bajo la filosofía de su fundadora: "una sola calidad: la mejor", el motor de esta empresaria. Esto se puede ver a través de su historia de vinos míticos de calidad inigualable. Solo diez maestros bodegueros han podido estar a la altura que requiere la casa y asegurar la fuerza y complejidad que se espera de sus productos.
Temperatura
El champagne idealmente se toma a una temperatura entre 8° C y 10° C, brindando un sabor, estructura y aroma perfectos.
Conservación
La botella se debe mantener de forma horizontal para que el corcho este humedecido y logre un cierre hermético perfecto. Si no te terminas la botella, consérvalo en frío (no más de dos días) con un tapón especial para champagne.
Tipo de copa
Las copas tipo flauta son una opción, pero para aprovechar todo el potencial de un buen champagne y sus aromas, se recomienda utilizar copas de vino blanco, para que la bebida se oxigene mejor y podamos apreciar todas las características de nuestro champagne. También las copas tipo tulipán son buena opción para degustar el champagne y permitir una buena efervescencia de nuestra bebida.
¿Cómo servir?
Llena la copa a tres cuartas partes de su capacidad. Si sirves más, se calentará demasiado rápido y perderá su frescura. Cuando el champán esté servido, agarre la copa por el tallo y no por el cáliz, así tus manos no calentarán el champán demasiado rápido.